Marcos Fletes Casco: condenado injustamente a 13 años de prisión.
Marcos Fletes Casco, de 42 años de edad, es el menor de varios hermanos. Desde niño fue muy querido por su familia y amistades, muy independiente y orientado a profesionalizarse. Es padre de un hijo de 15 años y de una hija de 12 años.
Marcos se desempeñaba como Contador General en la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH) hasta febrero de 2021, cuando esta suspendió actividades debido a la entrada en vigencia de la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros.
El 20 de mayo de 2021, Marcos fue citado junto a otros miembros del equipo de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro a comparecer ante el Ministerio de Gobernación, a responder por supuestas inconsistencias encontradas en los reportes financieros presentados.
Comparecieron ese mismo día, e inmediatamente, después recibieron citatorios para presentarse ante el Ministerio Público el 21 de mayo, y responder ante una investigación en su contra por el presunto delito de Lavado de Dinero, Bienes y Activos.
El 28 de mayo, en horas de la tarde, Marcos fue detenido con violencia por civiles armados que actuaron en connivencia con la Policía, quienes lo encañonaron.
Luego lo subieron en un microbús oscuro azul donde fue trasladado a un lugar desconocido. Desde entonces, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos condenó la detención, la cual procedió sin orden judicial y sin explicación sobre los motivos y expresó que la misma ocurría en el contexto de la intensificación de la persecución a la oposición y del proceso electoral en Nicaragua.
Por su parte, desde antes que los miembros del equipo de la Fundación fueran detenidos, el Departamento de Estado del Gobierno de Estados Unidos rechazó los señalamientos de supuesto “lavado de dinero” en contra de la FVBCH, basados en las auditorías realizadas a dicha organización como parte de la supervisión regular de los fondos proporcionados por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Durante los primeros noventa días que Marcos estuvo detenido, no se autorizó ninguna visita. En el proceso en su contra se incurrió en reiteradas violaciones a las garantías del debido proceso como la presunción de inocencia y el derecho de ser asistido por un abogado. La audiencia de juicio concluyó el 11 de marzo de 2022, con una condena dictada por el Juez Luden Quiróz, quien le impuso una pena de 13 años de prisión.
El juicio se desarolló a puertas cerradas, sin acceso a la prensa, siendo la mayoría de testigos policías y en una cárcel de la Dirección de Auxilio Judicial de la Policía Nacional. La Fiscalía no presentó pruebas que demostraran el delito, sin embargo, Marcos fue condenado.
Marcos padece de diábetes. Dicho padecimiento requiere exámenes periódicos y una atención médica oportuna y de calidad. Debido a que el Estado incumplió las Medidas Cautelares otorgadas el 24 de junio de 2021, la Corte Interamericana otorgó Medidas Provisionales, el 4 de noviembre de 2021. La Corte requirió al Estado proceder a la liberación inmediata de Marcos y le ha pedido adopte de forma inmediata las medidas necesarias para proteger eficazmente la vida, integridad y libertad, sin embargo, a la fecha, el Estado permanece en desacato.
Marcos Fletes está recluido en una cárcel de la Dirección de Auxilio Judicial Nacional, condenado por un delito que no cometió.
¡Libertad para Marcos Fletes!
Exigimos al régimen Ortega-Murillo: ¡Nicas Libres Ya!